De la mano de Pavone, River consiguió un triunfazo en Santa Fe.
El Tanque marcó el 2-1 en tiempo de descuento, cuando ya no quedaba nada, y el Millonario dio vuelta a Colón en un partido de ida y vuelta. El empate había sido obra de Erik Lamela, luego de una gran jugada colectiva. Los jugadores se retiraron eufóricos del campo de juego.
River construyó un triunfo enorme en Santa Fe, en un partido complicadísimo, y supo reponerse luego de estar en desventaja, cuando había hecho mejor las cosas que Colón. En la primera parte, contó con varias situaciones de gol y hasta con un clarísimo penal no cobrado sobre Erik Lamela.
El local se puso 1-0, luego de un cabezazo de Moreno y Fabianesi. Pero en la segunda parte, el equipo de Juan José López puso garra y buen fútbol para dar vuelta el asunto. Primero, hilvanó una exquisita jugada colectiva, repleta de toques, para terminar con una gran definición de Lamela, picándosela a Diego Pozo.
Desde entonces, el encuentro se hizo abierto y los dos tuvieron situaciones para marcar. Por el lado de River, Roberto Pereyra quedó mano a mano con el arquero y Rogelio Funes Mori, quien reemplazó a Ariel Ortega en el entretiempo, reventó el travesaño con un remate muy lejano.
Cuando ya no quedaba tiempo y se habían cumplido los tres de descuento que marcó Juan Pablo Pompei, Manuel Lanzini la guapeó, se metió en el área y dejó solo al Tanque, que le rompió el arco a Pozo y le dio la victoria agónica y festejadísima a River.
River construyó un triunfo enorme en Santa Fe, en un partido complicadísimo, y supo reponerse luego de estar en desventaja, cuando había hecho mejor las cosas que Colón. En la primera parte, contó con varias situaciones de gol y hasta con un clarísimo penal no cobrado sobre Erik Lamela.
El local se puso 1-0, luego de un cabezazo de Moreno y Fabianesi. Pero en la segunda parte, el equipo de Juan José López puso garra y buen fútbol para dar vuelta el asunto. Primero, hilvanó una exquisita jugada colectiva, repleta de toques, para terminar con una gran definición de Lamela, picándosela a Diego Pozo.
Desde entonces, el encuentro se hizo abierto y los dos tuvieron situaciones para marcar. Por el lado de River, Roberto Pereyra quedó mano a mano con el arquero y Rogelio Funes Mori, quien reemplazó a Ariel Ortega en el entretiempo, reventó el travesaño con un remate muy lejano.
Cuando ya no quedaba tiempo y se habían cumplido los tres de descuento que marcó Juan Pablo Pompei, Manuel Lanzini la guapeó, se metió en el área y dejó solo al Tanque, que le rompió el arco a Pozo y le dio la victoria agónica y festejadísima a River.
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